La motivación es importante en cualquier aspecto de nuestra vida y, también en el trabajo, y esto se refleja en el resultado de las tareas y problemas que afrontamos a nivel privado o en el ámbito laboral.
Una organización amparada por un equipo humano motivado será más competitiva, y por tanto mejor preparada para las adversidades del día a día y ante los cambios que se presenten en el mercado.
Te presentamos 6 técnicas a tener en cuenta si quieres motivar y que aprenderás apuntándote a nuestros cursos sobre gestión de personas:
1.- Dar reconocimiento
El reconocimiento del trabajo que está bien hecho. Es fácil caer en el error, que el dinero es incentivo suficiente para que el empleado cumpla con su trabajo y persiga la finalidad de la empresa, sin embargo, una vez cubiertas las necesidades básicas de seguridad y estabilidad, la recompensa monetaria no es la clave para evitar la desmotivación.
Otros aspectos pueden resultar más efectivos y agradecidos por el trabajador, como facilitar su promoción, proponerle retos, promover su formación continua y premiar con actividades lúdicas o regalos.
2.- Buscar el puesto ideal
El puesto perfecto para un trabajador debe ajustarse a sus habilidades y competencias. Si no es así, y su preparación supera a las responsabilidades y funciones de su puesto de trabajo, seguramente éste se aburra y tienda hacia la desmotivación. Igual de contraproducente es que una persona no esté lo suficientemente cualificada para lo que requiere el puesto de trabajo, con el tiempo, terminará por sentirse inseguro y estresado.
3.- Señalar lo que se espera del trabajador
Hablar con el empleado sobre las expectativas y planes de futuro que se esperan sobre él, haciéndole saber que se cuenta con su colaboración a largo plazo.
4.- Fomentar la salud y el bienestar laboral
Además de cumplir las normativas de seguridad y prevención de riesgos laborales es conveniente crear y promocionar una filosofía en la organización en la que se involucren todos en cuanto a higiene, medidas anti estrés, comodidad y ergonomía en el puesto de trabajo.
5.- Promover la participación
Esta acción busca fidelizar al trabajador mediante su participación en las decisiones y establecimiento de metas y objetivos individuales y de equipo. Convienen reunirse periódicamente para ello y así, generar compromiso, reconocimiento, sentimiento de utilidad, realización personal y respeto.
6.- Implementar políticas flexibles
Flexibilizar las condiciones de trabajo contribuye a una mayor productividad y felicidad en los trabajadores. Las condiciones personales de cada empleado son distintas y de esta manera podrán adaptarse a cada uno, como por ejemplo, el horario de trabajo, jornada reducida, los días de descanso…
Garantizar la satisfacción de las personas en el desempeño de sus tareas es complejo pero vital para el logro de los objetivos de la organización.
Los cursos de gestión de personas son la mejor herramienta para adquirir competencias que harán que un equipo dé lo mejor de sí mismo.
